La temporada avanza y la lluvia sigue sin llegar. Estamos en Octubre y las temperaturas son como de agosto, lo que esta haciendo que el movimiento de la caza sea prácticamente inexistente.
Pero al final como siempre en la caza, lo importante es meter horas, que desde en el salón de casa aún tenemos menos probabilidades.
Afortunadamente, y con la caída de las pocas bellotas que tienen este año los robles, pude tener un precioso encuentro con un jabalí que andaba rebuscando algo que llevarse a la boca. La fortuna me permitió poder cortarle el paso y tirarle a escasos doce metros de distancia, si es que llegaban.
Un jabalí precioso, y una oportunidad que me ha costado muchos años tener, no es nada fácil tirar un jabalí de ese calibre de día, recechando y a tan poca distancia. Un lance espectacular!
Con la temporada corcera llegando a su fin, y disponiendo aun de un ultimo precinto en la mochila, tuve la suerte de poder tirar este precioso macho en lo alto de la sierra.
Un terreno complicado de cazar el corzo, que junto con su belleza, hacen su caza tan gratificante.
Suerte a todos en el campo,
Pedro Ampuero